
Knight v Snail III: Extreme Jousting, Li Livres dou Tresor, France (Picardy), c. 1315–1325, Yates Thompson MS 19, f. 65r.
In today’s Gospel, Jesus tells us plainly: “Whoever does not renounce all his possessions cannot be my disciple.” These words strip away illusions. The call is not about doing a little more, but about reordering everything around Him. He uses the image of a tower and of a battle. Both require preparation, vision, and courage. Following Jesus is not an impulse or a passing enthusiasm—it is a daily decision, as serious as building, as demanding as fighting. Saint Augustine once wrote in his Confessions: “Our hearts are restless until they rest in You.” That is why Jesus asks us to let go: not to diminish our lives, but to free our hearts from restlessness, so that only in Him we find our true rest. This is echoed in music too. U2’s song I Still Haven’t Found What I’m Looking For captures the longing of the human heart—searching, reaching, never satisfied. The Gospel answers that longing: in Christ, the search ends, and the journey finds its purpose. The cost is real, but so is the joy. To carry the cross with Him is not to lose life, but to discover it in its fullness. The real question is: am I willing to let go, so that my heart can finally rest in Him? • AE

St. Joseph Catholic Church (Dilley, TX) • Weekend Schedule

Fr. Agustin E. (Parish Administrator)
Saturday, September 6, 2025.
5.00 p.m. Sacramento de la Confesión
6.00 p.m. Santa Misa.
Sunday, September 7, 2025.
8.00 a.m. Sacrament of Reconciliation
8.30 a.m. Holy Mass.
10.00 a.m. Sacrament of Reconciliation.
11.00 a.m. Holy Mass.
XXIII Domingo del Tiempo Ordinario (Ciclo C)

Josep Maria Subirachs (1927–2014), Simón de Cirene. Jesús Camino del Calvario, Fachada de la Pasión, Basílica de la Sagrada Familia (Barcelona)
En el Evangelio de hoy, Jesús nos habla con una fuerza que no deja lugar a dudas: “Quien no carga con su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo.” Ser cristiano no es un pasatiempo, ni un sentimiento pasajero. Es una decisión radical que transforma todo: nuestras relaciones, nuestros bienes, incluso la manera en que miramos la vida. Las imágenes de la torre y la batalla nos recuerdan que no se puede improvisar. Para seguir a Jesús hay que decidirse con seriedad, sabiendo que la cruz no es un accidente en el camino, sino parte del camino mismo. Aquí resuena una frase de Simone Weil: “La gracia llena lo que vacía.” Esa es la lógica de Cristo: perder para ganar, entregar para recibir, renunciar para encontrar la vida verdadera. Y la música nos lo hace sentir. En el Kyrie de la Misa en si menor de Bach, la súplica se eleva con fuerza serena, como un corazón que reconoce su necesidad de Dios. Así es el discipulado: cuesta, pero en esa entrega está escondida la belleza de la vida en Cristo. La gran pregunta, que ademas es personal es si estoy dispuesto a soltar lo que me ata para seguir a Jesús de verdad • AE
Johann Sebastian Bach compuso la Misa en si menor a lo largo de varios años, reuniendo y reelaborando piezas anteriores hasta darle su forma definitiva en 1749, un año antes de su muerte. No fue concebida para una liturgia concreta, sino como una obra monumental de fe y arte, en la que Bach quiso ofrecer una síntesis de toda su maestría musical al servicio de Dios. El Kyrie, con su súplica intensa y solemne, abre esta catedral sonora que une tradición católica y profundidad luterana en una sola alabanza.

¿qUé LeEs?




